La serie P de Ferrari son coches deportivos construidos en la década de los '60 y principios de los '70 para participar dentro de las categorías sport-prototipos en los campeonatos de resistencia y en especial en las 24 Horas de Le Mans.
Los líderes de la Empresa Ford, intentaron la compra directa de la Scudería y la negativa de Enzo Ferrari, quien no era un hombre que se inclinara ante el poderío de otra marca, dio inicio a la temporada más competitiva y conocida en el mundo de los coches de carreras de resistencia.
Así de 1963 a 1967, la Scuderia Ferrari conoció al rival más poderoso que nunca había tenido ante sí y se vio obligada a reconocer dolorosas derrotas ante la acometida del gigante de Detroit, pero los prototipos de Ferrari concebidos durante este periodo son probablemente uno de los más prestigiosos ejemplos de técnica, refinamiento y elegancia. Para muchos, todos los Ferrari P con sus diferentes motorizaciones y en especial el Ferrari 330 P4 son considerados los coches de carrera más bellos jamás producidos. Son considerados por muchos, junto con el Porsche 917 y el Ford GT40, los "monstruos sagrados" de los campeonatos de marcas.